domingo, 18 de febrero de 2007
Llega la hora de dormir, lo que es un verdadero sufrimiento. Numerosos sentimientos nublan mi mente: envidia, rencor, odio, soledad... Transcurren segundos, minutos, horas.
-Que diablos me sucede.
-No lose.
-Deberías, ¡sí tu eres el culpable de todo esto!
-No.

Mientras el silencio inunda mis odios, llega la luz, una forma de quitarme esto que me agobia cada noche. Preparo mi "estudio", el cual solo consta de un vieja tela verde, apago la luz para luego encender un par de lámparas, tomo la cámara y retrato numerosas expresiones que vienen a mi mente, solo con el fin de mostrar lo que siento y de alguna u otra manera pedir perdón, por todo lo que en algún momento he hecho con solo un sentimiento que ronda mi cuerpo, la venganza.
-¿Venganza? ¿Venganza de que?, ¡si generalmente mi mente inventa todo!
-No lose.
-Solo juegas con migo.
-No.

Invadido por el sueño decidí apagar mis sentimientos guardados en 512mb, desmonto el estudio...
-Oh dios esta amaneciendo, será mejor dormir.
-Si.
-Cállate.

Agotado por el sueño, decidí solo tumbarme en mi cama y esperado caer en mis absurdos sueños.

Esteban Castro Coronado at domingo, febrero 18, 2007 | 4 comments